Última manzana mordida de la Historia
El
futuro no es lo que era. Lejos estamos de los skates voladores de Matel y la colonización
de otros mundos habitables. Estamos en éste, pero no por mucho tiempo. El poco
prometedor panorama nos muestra las consecuencias de un planeta que hemos
vampirizado hasta decir basta. La manipulación genética ha hecho mella en todos
los ámbitos de la sociedad y un ejército de plagas e infecciones arruinan las
fuentes de alimentación del hombre. Los países se han cerrado al comercio
exterior, el control de las actividades se ha vuelto férreo y en esta autarquía
dictatorial, ser humano no significa nada. No serlo, algo mucho peor.
Éste
es el contexto en el que nos sitúa La
Chica Mecánica, ópera prima de Paolo Bacigalupi. La historia nos sumerge en
el Reino de Tailandia donde reside Anderson, un extranjero empleado por una
multinacional alimentaria con el fin de descubrir cómo es posible que el país
esté produciendo fruta inmune a las plagas.